Desde el impenetrable chaco.
Del
30 al 2 de noviembre, en Fortín Lavalle (en tiempo de los antiguos se lo
llamaba pio´lahuac), Chaco Impenetrable, se realizó el Octavo encuentro cultural de los Pueblos
Originarios Qom y Kanak.
Danza de los antiguos, obra de
teatro, en qom´latac (idioma qom), músicos qom cantadando en la idioma, entre
otras cosas, expusieron los participante, de dicho encuentro.
Si tenemos en cuenta la historia
oficial, a este rincón de lo que
hoy conocemos como chaco. Empiezan a mediados del siglo XIX, a arribar los que serán los encargados de correr la frontera un poco más al norte, luego, a partir de 1870, comienzan los envíos de tropas de un modo más sistemático. Los avances se efectúan en especial desde dos frentes: desde el norte de Santa Fe y desde el oeste de Salta, lo que permitió reorganizar los fortines existentes.
En esos años
se funda los principales ingenios azucareros: Las Palmas (Chaco, 1882), La Esperanza (Jujuy, 1884),
Ledesma (Jujuy, 1884), Formosa (Formosa, 1884), entre otros, y al mismo tiempo
se tienden y desarrollan líneas férreas (financiado con capital ingles) que
conectan las principales ciudades y que permiten el traslado de la producción y
de obreros.
Este año1884 puede
entenderse como la oficialización de la “conquista verde”, el 26 de
julio el presidente Julio Argentino Roca solicitó ante el congreso de la Nación
la adjudicación de una partida especial
del presupuesto para llevar adelante una ofensiva militar al chaco: "Debemos remover las fronteras con los
indígenas; éstos deben caer sometidos o reducidos bajo la jurisdicción nacional
pudiendo entonces entregar (tierra) segura a la inmigración y a las
explotaciones de las industrias de la civilización; mil leguas que riegan el
bermejo, el Pilcomayo, el Paraná y el
Paraguay y que limitan las montañas que nos separa con Bolivia”.
En 1916 se
lleva a cabo el último envío de tropas a cargo del coronel Enrique Rostagno y
el Presidente de la Nación Hipólito Yrigoyen dará por finalizadas las campañas
militares al chaco.
La
memoria, negación del olvido
El
sol salpica la ruta, con sus encendidos rayos, parece que la humedece a la
lejanía, mojada a la ruta se la ve, pero no, es trampa del sol y sus rayos.
Avit le llaman a este momento, como siesta se la conoce. Las lagartijas se
alivian bajo los yuyos, calor hace, es un rasguñar afilado, penetrando de a
poco el cuero.
En
el olvido nada vive, todo es ausencia, no hay cuerpos, reclamando sus sombras.
En
la memoria, todo es vida, aunque no sea en cuerpo: presencia absoluta, devenida
en pensamiento.
En
la memoria, pasan quedándose, fotografía reinventada con los días pasando, rio
que fluye sin irse. Evocación continua de un pasado que va adelante.
La
memoria caminante y camino.
Es la
tarde ya, las serpientes blancas florecen en el cielo tronando enérgicas, la´at
(viento) llega soplando fuerte a las nubes negrasmarronadas. Auot (lluvia)
llaman lo que de arriba mandaron las nubes, a este cielo de abajo. Llueve y es
un bombo legüero esta casa de chapa.
La memoria,
pilar fundamental en la recuperación de lo cultural, de lo que se ha sido, de
lo que es y de lo que no se quiere ser.
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